¡Hello, My Friends!

Un saludo muy especial a todos y cada uno de los integrantes del proyecto CONEXIONES , de parte de Elga Deyanira Solano Jaimes.

A partir de este momento quiero compartir mutuamente las experiencias que sucedan a lo largo del desarrollo del proyecto, pues de ellas depende el éxito del mismo.

Soy nueva en este establecimiento educativo (al cual he admirado siempre, pues también soy normalista sólo que egresada de la Escuela Normal Mixta de Piedecuesta, promoción de 1998); sólo llevo aquí dos semanas -desde el 21 de julio- , pero en este corto tiempo he sentido lo agradable que es trabajar en un colegio de bachillerato y con mayor razón  en una Normal: formadora de maestros.

Antes de llegar aquí, trabajaba en una escuela de básica primaria en el municipio de Floridablanca. Fué  una experiencia de ocho años y medio; de ella puedo contarles que es muy lindo trabajar con niñas y niños cuyas edades oscilan entre los 6 años (1º Primaria) y los 11 años (5º Primaria), porque son personas con tantas capacidades como las que posee un adulto (sólo que viven en cuerpos más pequeños).

Los últimos 5 años en ese establecimiento tuve  a cargo los grados 4º y 5º progresivamente y eso me sirvió mucho aquí en la Normal, porque los estudiantes de 6º y algunos de 7º aún conservan ese espíritu hermoso de la niñez y la "escuela" y apenas están entrando en la adolescencia.

Pero también he tenido la fortuna de trabajar con niños(as) en edad preescolar. Esos "bebés" son los seres más maravillosos que puedan existir como estudiantes, porque son espontáneos, sinceros, extrovertidos y no les da pena hacer nada (cosa que no ocurre cuando se está en el bachillerato); esos pequeñines comparten mutuamente con sus amigos; concilian cuando por alguna razón discuten y se contentan de una manera que no deja resentimientos ni deseos de venganza. Esas cualidades no deberían extraviarsen ni desvanencersen por el camino de la escolaridad y menos con el paso de los años, por el contrario, deberían permanecer y fortalecersen, así seríamos más felices.

El colegio que me dió la oportunidad de desempeñarme como profesora y creyó en mis capacidades fué el liceo: El Niño y su Mundo, en Piedecuesta. Allí estuve por espacio de 3 años(1989-1991), y como  lo expresé, fué una experiencia enriquecedora.

Simultáneamente, mientras trabajaba en el Liceo, empecé a estudiar Diseño Textil (porque quería proyectarme algún día en un área distinta a la docencia, pero paralela a ella). Cuando terminé materias y sólo me faltaban unas prácticas para titularme, me llegó el nombramiento en propiedad y tuve que decidir entre graduarme (pues el titulo era lo único que me faltaba) y aceptar  el cargo con el gobierno...
aunque fué algo difícil, finalmente acepté pues me di cuenta que ello representaba mi estabilidad laboral, además ero lo que siempre quise: Ser Maestra. La carrera de diseño me permitió conocer, sobre áreas que nunca había manejado: fotografía, dibujo técnico, estampados textiles... en fin, y ademá me dió la oportunidad de desarrollar  habilidades y explotar potencialiades que no sabía que tenía. De esa experiencia concluí: " Todo lo que uno aprende tiene gran valor y en algún momento de la vida lo va a necesitar, a veces en el menos pensado."

En el mismo año en que me nombraron (1994), inicié mis estudios de Español y Comunicación, y 4 años más tarde (1998) ya era licenciada. Un mes antes del día de graduación ya había iniciado mis estudios de Postgrado y al año siguiente obtuve el título de Especialista en Metodología de la Enseñanza del Español y la Literatura.

Siempre me incliné por los idiomas (eran mis materias preferdas en el colegio),  por ello me he capacitado constantemente en inglés(paralelo al español) haciendo cursos en diferentes institutos (UIS, Celai), y hoy en día adelanto una profesionalización en Inglés con el Instituto de Lenguas de la UIS, porque aunque no soy licenciada en este idioma, siempre me he capacitado y eso me ha permitido expandir y ampliar mi campo de acción.

En cuanto a mi familia les comparto lo siguiente: vivo rodeada de las personas más importantes en mi vida: mis padres, mis dos hermanas y mi sobrino. El resto de mi familia (tíos, tías, primos. primas...35 en total) complementan y forman el círculo de personas con las cuales he compartido todos y cada uno de mis momentos,  de quienes he aprendido todos los valores que un ser humano debe tener y a quienes les debo mucho de lo que soy y  a donde he podido llegar. Gracias a todos los mienbros de mi familia (sin excepción) sé para que estoy en el mundo, pues de ellos he sabido que uno existe para cumplir con una tarea especifica, la mia por ejemplo, es servir como orientadora en la formación de las nuevas generaciones.

Elga Deyanira es una persona a la cual le gusta leer, lo que se le cruce por las manos, con preferencia obras de suspenso (por eso Edgar Allan Poe es mi autor preferido) y literatura hispanoamericana (especificamente Horacio Quiroga), es uno de mis buenos hábitos. También practico la natación  (lo hago desde los 5 años), y montar bicicleta (pero no en cilcovías, porque me aterran las multitudes). Veo mucha television (siempre y cuando tenga tiempo) sobre todo programas relacionados con ciencia y tecnología, documentales y animales -por eso soy adicta a Discovery Channel y Animal Planet-. En mis días de descanso prefiero estar en la casa a menos que haya un paseo familiar.

Bueno creo que ha sido suficiente lo que deben saber de mí, espero conocer más sobre ustedes y aprender mucho del proyecto y por supuesto poder aportar mi granito de arena.

Good Bye

Elga Deyanira Solano